Lavandería de autoservicio para empresas

Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp

Las lavanderías de autoservicio se han convertido en un negocio floreciente para aquellos que deciden invertir en un negocio rentable sin demasiadas complicaciones. Cada vez son más los locales se llenan de lavadoras y secadoras para ofrecer un servicio de calidad a los usuarios que, por la razón que sea, carecen de lavadora o prefieren ahorrar un poco en su factura de la luz. Como fuere, las lavadoras son indispensables en nuestra vida y, si carecemos de ellas, bien podemos utilizar alguno de los servicios disponibles. Lavatur es una de esas empresas que con décadas de experiencia en el sector, ofrecen soluciones de todo tipo. Tanto empresas como particulares pueden beneficiarse de los servicios de lavandería que ofrecen las empresas de, válgame la redundancia, lavandería.

Aunque se trate de un sector sin sobresaltos y bastante lineal, no deja de ser un servicio necesario que, siempre va tener relevancia en la sociedad. Razón por la que no está de más, conocer un poco más sobre el mismo y saber cuales son las posibilidades de negocio que ofrece. Aquellos a quienes les interese invertir y tener su propio negocio sin necesidad de volverse loco, este sector ofrece la solución perfecta, sobre todo si nos decantamos por las lavanderías de autoservicio.

En este artículo vamos a ver las posibilidades que ofrece el sector. Tanto si ofreces servicios de lavandería industrial como si te dedicas a montar una lavandería de autoservicio. Las empresas que gestionan los servicios de lavandería ofrecen una excelente alternativa a otras empresas como pueden ser hoteles, hospitales, cuarteles del ejército, albergues… Se trata de una solución ideal para estos negocios por razones más que evidentes. No hay que invertir en los equipos pues la empresa de lavandería se encarga de instalar los sistemas de lavado más actuales disponibles en el mercado.

Algunas empresas, ofrecen la posibilidad de obtener beneficios sin necesidad de realizar inversión. No hay que ocuparse del mantenimiento de las maquinas, ni de la venta de las fichas, el control financiero, etc. La asistencia técnica estará disponible en todo momento y la respuesta en caso de problema será en un tiempo récord, además de contar con la sustitución de los equipos en caso de que el problema no pueda solucionarse en el lugar y momento.

Se trata de un servicio que siempre va a estar listo para su uso. Los clientes pueden realizar su propia colada a precios económicos evitando hacer uso de lavadoras domésticas cuyo uso público no está permitido. Es posible contar con un refuerzo de temporada llegado el caso, para poder prestar un buen servicio a los clientes. La instalación incluye complementos necesarios para encastrar las máquinas, la dosificación adecuada de detergente y suavizante, así como el sistema de pago mediante efectivo o tarjeta.

Cuenta con la opción de uso de fichas para disponer de precios más económicos, así como con equipos específicos para lavar adecuadamente las prendas de las mascotas.

Indudablemente, este tipo de servicios, son todo un acierto. Tanto si quieres invertir en el como si solo quieres prestar el servicio en tus instalaciones, es la solución perfecta. Si quiere obtener beneficios, puedes hacerlo; si solo quieres prestar el servicio sin más implicación, también es posible. En cualquiera de los dos casos, los clientes quedarán satisfechos pudiendo realizar sus coladas en un lugar adecuado, contando con la maquinaria más eficaz y sin demasiado coste.

Funcionamiento de una lavandería de autoservicio

En la actualidad es frecuente tropezar con este tipo de lavanderías. Ya sea dentro de negocios como hoteles, campings o albergues, o residencias para estudiantes, por citar algunos ejemplos, o a pie de calle, la presencia de las lavanderías de autoservicio, no es una novedad. Es fácil encontrarse con una en cada esquina.

Proliferan notablemente y no es de extrañar debido a las facilidades que ofrecen. Aunque su funcionamiento es sencillo y apto para cualquier tipo de público por inepto que uno sea, vamos a contar como funcionan este tipo de lavanderías que encontramos, generalmente a pie de calle, aunque pueden encontrarse en diversos lugares como los citados anteriormente.

En primer lugar, diremos que se trata de un servicio que ofrece confort y sencillez a quien lo utiliza. Confort porque puedes permanecer cómodamente en las instalaciones mientras se realiza la colada o puedes irte a tu casa o seguir con tus tareas. Sencillez porque realmente, se trata de un funcionamiento más que sencillo. Poner estas lavadoras, no tiene nada de complicado como puede ocurrir con una lavadora doméstica y la ingente cantidad de programas que tiene y nunca utilizamos.

Cuando acudimos a una lavandería de autoservicio, sea dentro de otra empresa o en la calle, podemos pensar que se trata de algo complicado. La realidad es justamente lo contrario. Se trata de un servicio cómodo y eficaz debido a los altos estándares de calidad a los que están supeditados este tipo de servicios. La innovación y la inversión realizada en los mejores productos de limpieza y equipos profesionales, no son un problema para las empresas que disponen estos servicios. Las mismas, ofrecen la posibilidad de tener tu ropa lavada y seca en un tiempo récord: una hora. Un lavado de altísima calidad y con un acabado y suavidad que nada tienen que envidiar al lavado en casa. En la mayoría de los casos, la ropa saldrá de la lavadora o secadora listar para doblar y llevar, sin necesidad de planchado.

Esto es posible a que las maquinas que ponen a disposición de los clientes, son de categoría profesional y cuentan con una selección de equipos de lavado que se adaptan a las necesidades de todo tipo de clientes: lavadoras con capacidades de nueve a diecinueve kilogramos de pesos y secadoras con semejante capacidad, en la mayoría de establecimientos o instalaciones.

La intención de estos servicios es facilitar al cliente la tarea y prestar un servicio tan cómodo como práctico facilitando el uso de máquinas tan potentes que de otro modo no pueden utilizarse. Con este servicio, se ahorra tiempo y dinero.

Para conseguir que tu ropa quede excelentemente lavada, tan solo hay que seguir unos sencillos pasos:

  • Ir a la lavandería en cuestión o acercarse a las instalaciones destinadas a tal fin en el hotel o lugar que corresponda con la ropa preparada para ser lavada. (Es tan obvio que podría evitar decirlo pero, es lo primero que hay que hacer).
  • Una vez en la lavandería, se elige la máquina a utilizar en función de la carga que vayamos a introducir. Esto puede parecer una tontería pero es importante no sobrecargar una máquina o, por el contrario, ponerla a medias. Antes de meter la ropa, volver a revisar los bolsillos, cerrar las cremalleras, etc.
  • Seleccionar el programa deseado en función de las prendas a lavar. No disponen de tantos como las lavadoras domésticas, afortunadamente, lo que simplifica bastante la decisión.
  • Introducir el importe del lavado en la ranura que la máquina tiene a tal efecto. Una vez que se introducen las monedas, la máquina se pone a funcionar sin más. Normalmente no se pueden parar una vez que se inicie el lavado, por lo que conviene asegurarse de que todo está en orden. Si la paras, lo más probable es que tengas que volver a pagar el importe para continuar. Es uno de los aspectos menos favorables, pero es así.
  • Finalizado el lavado, podemos optar por secar la ropa en el caso de que no lo hayamos hecho desde el principio o llevárnosla para secarla en casa.

Como se puede ver, utilizar un servicio de lavandería automático, es más que sencillo. No tienes horarios, supone un ahorro de tiempo y económico y el resultado suele ser óptimo. Además de que en las instalaciones o establecimientos, es posible encontrar otros servicios adicionales para procurar que la visita a la lavandería sea práctica y cómoda. La mayoría de estos establecimientos, disponen de una mesa para doblar la ropa, cestas para la misma, zona de espera con sillas, WiFi, hilo musical, máquina para cambiar las monedas e incluso máquinas de café y vending con productos de todo tipo por si te apetece un café o tentempié mientras esperas.

Seas particular o empresa. Quieras invertir o simplemente prestar un servicio más a tus clientes sin tener que implicarte demasiado. Las lavanderías de autoservicio son un servicio de incuestionable valor, perfectamente adaptado a los tiempos y las circunstancias. Válido para todo tipo de usuarios, en cualquier lugar y en cualquier momento, las lavanderías de este tipo son una excelente opción. Tanto para los clientes del establecimiento como para los propietarios del establecimiento en sí, que solo quieren brindar un servicio a sus clientes, esta solución cuenta cada vez con más demanda y una excelente acogida por ambas partes.

Un servicio que las empresas de lavandería prestan a otras empresas para que a su vez, presten un servicio a sus clientes, o un servicio directo que las empresas de lavandería prestan a sus clientes, sin intermediarios. En cualquier caso, la mejor manera de tener tu colada limpia sin necesidad de tener una lavadora en casa o en el lugar en el que te encuentres de vacaciones o viaje de negocios, por ejemplo.

Noticias relacionadas

Scroll al inicio